La afición española se hace sentir en casa del anfitrión
Stuttgart, 5 jul (EFE).- La afición española, minoría absoluta al jugar contra la anfitriona Alemania, se hizo sentir y puso algo de color rojo en las pobladas y blancas calles de Stuttgart, localidad en la que se celebra el partido de cuartos de final de la Eurocopa 2024.
Stuttgart, 5 jul (EFE).- La afición española, minoría absoluta al jugar contra la anfitriona Alemania, se hizo sentir y puso algo de color rojo en las pobladas y blancas calles de Stuttgart, localidad en la que se celebra el partido de cuartos de final de la Eurocopa 2024.
Unos 10.000 aficionados desplazados se miden contra todo un país -reducida a 44.000 en el Stuttgart Arena en el que tendrá el duelo-, en una final anticipada para muchos y para la que los españoles ponen el color rojo ante la marea blanca de camisetas de la 'Mannschaft'.
De nuevo liderada por un trompetista y un encargado de la prescusión con un bombo, la hinchada española dotó de algo de alegría la previa, en la que la zona habilitada para los aficionados estuvo llena.
El clima amable que presentó el día, alejado del gris de Colonia previo al duelo ante Georgia, amenizó la espera hasta la hora de emprender camino al estadio, en el que se volvieron a escuchar a los españoles cantar, entre otras canciones, "Mi gran noche", de Raphael, la que suena por megafonía en todos los estadios tras cada gol de España.
La mancha roja, aunque reducida contra los 44.000 alemanes, resaltará entre todo el blanco que convertirá el estadio en una caldera, en una olla a presión que intentará llevar en volandas a su selección, que no gana a la española en partido oficial desde 1988, hace 36 años.
Algo parecido, en lo que se refiere a la afluencia de afición, ha sufrido España en el resto de partidos, donde en la mayoría ha sido inferior numéricamente en las gradas, aunque no de manera tan clara y que en ningún caso le ha impedido desplegar su buen fútbol, invicta hasta el momento.
Ante Georgia, cuando más igualado estuvo en el estadio, fue curiosamente cuando más lo sufrió, especialmente tras encajar el único gol en lo que va de torno, porque el estadio de Colonia se volcó con la 'Cenicienta' de la Eurocopa y dejó algo mareado al combinado español.
En Stuttgart, mientras que Alemania busca acabar con esa mala racha de 36 años y acercarse al sueño de ganar el título en su casa, España quiere alcanzar su sexta semifinal de Eurocopa y acabar con la maldición del anfitrión, al que nunca ha ganado en Mundial o Eurocopa.